sábado, 30 de junio de 2007

Cárceles: los derechos humanos en suspenso

Ya es evidente el hecho de que en América Latina las cárceles no funcionan como deberían. Los crecientes niveles de pobreza y marginalidad, sumados a penas cada vez más duras en pro de reprimir la ascendente tasa de criminalidad fruto de los factores anteriores, lleva a un explosivo resultado de cárceles superpobladas, donde los derechos humanos están en un gran paréntesis. Uruguay no es ajeno a esta situación.

Ya son varias las denuncias acerca de la situación en la que viven los reclusos en las cárceles de nuestro país. En el año 2005, el parlamento aprobó una ley para descongestionar las mismas, que tuvo un corto efecto ya que a la fecha los problemas de hacinamiento contínuan.

Mientras expertos en criminología señalan que el derecho penal es el último recurso para combatir el crimen, la demagogia lo ha convertido en el primero, con penas señaladas por amnistía internacional como ridículamente altas en relación a la causa de encarcelamiento. Si bien el objetivo teórico de una cárcel es rehabilitar al recluso para reinsertarlo en la sociedad, es comunmente conocida como la "escuela de delincuencia".

La crisis carcelaria es una situación que no puede seguir ignorándose por más tiempo. Es necesario dejar de hacinar y torturar reclusos como forma de bizarra "venganza" por sus actos y redactar un nuevo código penal, moderno y coherente, que realmente apunte a reinsertar a un delincuente a la sociedad a través de un tiempo moderado de prisión, trabajo comunitario y estudio.

domingo, 24 de junio de 2007

Nunca más violencia

Todos los años desde hace más de un siglo y medio, el 19 de Junio es conmemorado como la fecha de nacimiento de José Artigas. Sin embargo, el pasado 19 de Junio tuvo una particularidad adicional. Por decreto presidencial, la fecha fue reconocida como el "Día del Nunca Más", en referencia a los episodios de violencia vividos durante la guerrilla y la posterior dictadura.

Bajo la convocatoria "Nunca más uruguayos contra uruguayos", el presidente Vázquez realizó un acto en la Plaza Independencia, acompañado por ministros de su gabinete, la viuda del General Líber Seregni y varios miembros de la oposición.

El hecho generó reacciones variadas, dado que mientras hay quienes se manifiestan a favor, como forma de cerrar un nefasto capítulo en la historia del Uruguay y como repudio a la violencia vivida sin hacer alusión especial a ninguno de los dos bandos, también hay voces en contra, que reprochan que no sea un "nunca más al terrorismo de estado" y sostienen que la vuelta de página no puede darse simplemente por decreto mientras haya impunidad para los militares responsables de la captura, tortura y muerte de muchos detenidos.

Han pasado treinta y cuatro años del golpe de estado que interrumpió la vida democrática del país y lo sumergió en doce años de miedo y terror. Tal vez este acto, que reunió a miembros de todos los sectores políticos, sea una señal de que es hora de dejar de sufrir por el pasado y mirar hacia adelante, hacia un futuro mejor en democracia y paz. Si bien las heridas aún abiertas no hacen de esto una tarea fácil, ha quedado claro que hay voluntad de lograrlo.

sábado, 23 de junio de 2007

Nota del editor

A los lectores:

Antes de empezar, es bueno hacer una breve introducción sobre el motivo de este blog, así como una presentación de su autor.
Quien escribe es estudiante de Derecho en la Universidad de la República, en Montevideo, Uruguay, y este blog nace con la idea de hacer un análisis crítico de las noticias sobre el país y el mundo en general.
La verdad es relativa al punto de vista con el que se la estudie (he aquí la famosa frase "Si la historia la escriben los que ganan, eso quiere decir que hay otra historia"), y mientras más puntos de vista se oponen en el análisis de un hecho, más cerca estamos de conocer la verdad de su esencia.

A lo largo de la historia, la información siempre fue sinónimo de poder, y quienes ansiaban poseer lo segundo, debían antes dominar lo primero. Así es como durante la edad media la información fue monopolizada por la Iglesia (de manera muy bien relatada en el best seller de Umberto Eco El Nombre de la Rosa), durante el Tercer Reich la información en Alemania fue filtrada y administrada por el ministro de propaganda de Hitler, Joseph Goebbels, entre cuyos principios puede destacarse la frase Una mentira dicha mil veces se convierte en verdad, y por último tenemos el ejemplo de la dictadura cívico-militar a la que estuvo sometida buena parte del continente hace un par de décadas, durante la cual había una imperante censura de prensa escrita y oral.

Para resumir, este blog es simplemente una manera más de afirmar que los uruguayos no somos títeres cuya opinión pueda ser moldeada a través de informativos sensacionalistas ni verdades incuestionables.

Son más importantes las preguntas que las respuestas
Karl Jaspers